Ecocidio por obras se extiende a la Central de Abasto; ahora, por el Citybús en Oaxaca
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Álvaro Morales
A pesar de la existencia de al menos cuatro suspensiones provisionales emitidas por el Poder Judicial de la Federación, que ordenan a las autoridades estatales suspender el derribo de árboles en la obra de ampliación a ocho carriles de la avenida Símbolos Patrios, las instancias gubernamentales han continuado con la tala de especies en otros proyectos que se llevan a cabo en la zona metropolitana de la capital del estado.
Uno de aquellos proyectos es el CityBús, en cuyas labores de construcción, en inmediaciones del Mercado de Abasto, fueron derribadas durante la última semana más de 30 especies, en un franco desafío a las medidas de protección al ambiente dictadas por los tribunales federales, de acuerdo con la denuncia hecha por organizaciones no gubernamentales.
Si bien las medidas preventivas emitidas por el Poder Judicial se limitan a una obra en específico, como es la de Símbolos Patrios, diversos activistas consultados sostuvieron que el gobierno, al provocar el deterioro del ecosistema en otros puntos de la ciudad, deja en evidencia que no le preocupa preservar el ambiente, a pesar de que con ello vulnera los derechos humanos de los ciudadanos.
En una de sus últimas acciones, emprendida la semana pasada, trabajadores de la empresa que realiza las adecuaciones de los carriles que serán utilizados por los autobuses del llamado CityBús, sobre el Periférico de la ciudad, en inmediaciones de la Central de Abasto, arrasaron con 30 especies, entre ellas 20 majaguas, ocho álamos y un guajal, que yacían a lo largo de la arteria vehicular.
Ante ello, un grupo de activistas llevó a cabo la clausura simbólica de la obra en construcción y a través de la cual se pretender erigir una serie de paradas especiales que serán utilizadas por el nuevo sistema de transporte.
Los inconformes acusaron a los responsables de la obra de haber promovido aquel ecocidio a pesar de que no cuentan con los dictámenes correspondientes para efectuar modificaciones en el entorno urbano.
En ese mismo sentido, sostuvieron que los representantes de la empresa, ésta originaria del Estado de México, pretende continuar con las modificaciones y con ello derribar al menos 100 árboles más.
En un primer momento, el jueves 30 de septiembre un grupo de activistas se apersonaron en la zona de la edificación tras recibir la denuncia de que los trabajadores habían cercenado decenas de especies.
Al arribar al lugar, los defensores fueron notificados de que se trataba de una poda del arbolado; no obstante, éstos pudieron atestiguar que la poda había sido agresiva en exceso, al haberlos privado de más del 95 por ciento de su follaje.
Días después, cuando los activistas regresaron, se percataron que varios de aquellos árboles, finalmente, había sido derribados.
“No hay estudio de impacto ambiental”, acusó al respecto Gerardo Aldeco Pinelo, presidente del Colectivo de Organizaciones Ambientalistas de Oaxaca.
Aquel ambientalista, con ayuda de otros defensores más, efectuó la “clausura simbólica” de las obras, a efecto de “impedir” más atentados contra el ecosistema.
Y en otro pronunciamiento público, la propia Coordinadora de Organizaciones Ambientalistas de Oaxaca (COAO), liderada por Gerardo Aldeco Pinelo, ofreció este miércoles seis de octubre “una ofrenda” para los árboles que fueron derribados la semana pasada.
Tal y como se registró en la obra de Símbolos Patrios, los activistas demandaron que el proyecto sea modificado, a efecto de respetar las áreas verdes y proteger el derecho humano de la sociedad a un medio ambiente sano.
Reiteraron que las movilizaciones de los colectivos no son en contra de la implementación de los proyectos, sino para que éstos no afecten el patrimonio natural de la zona metropolitana de la ciudad.
De hecho, el jefe del área de Meteorología de la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPCO), Cutberto Ruiz Jarquín, alertó que las últimas inundaciones registradas en la ciudad de Oaxaca, donde decenas de vialidades se convirtieron en ríos de respuesta rápida arrastrando vehículos, se debieron al crecimiento anárquico de la plancha de concreto y a la tala desproporcionada del arbolado, lo que ha derivado en que el calentamiento diurno sea mayor, provocando tormentas locales fuertes, cuya precipitación ya no puede ser absorbida eficazmente por el subsuelo.
Ante ello, el especialista llamó a las autoridades municipales y estatales, a implementar un proyecto integral de reordenamiento urbano, en el que se incluya la reforestación de zonas afectadas por la mano del hombre y la no invasión de ríos y arroyos, así como evitar la proliferación irracional de la plancha de concreto (principalmente a través de vialidades).
En ese sentido, el Poder Judicial de la Federación ha concedido a la sociedad organizada de la capital cuatro suspensiones provisionales para frenar el derribo de árboles en la obra de ampliación a ocho carriles de la avenida Símbolos Patrios, en la ciudad de Oaxaca.
Con ello, jueces y tribunales han frenado un ecocidio que contemplaba, hasta antes de la promoción de aquellos recursos, derribar más de mil 500 especies que actualmente yacen a lo largo de los 2 kilómetros de longitud de aquella vía, que conecta con el sur de la zona metropolitana, confirmaron activistas a Agencia CIO.
Las suspensiones provisionales permanecerán vigentes hasta que los juzgadores resuelvan si otorgan o no las suspensiones definitivas y, posteriormente, emitan las sentencias respectivas.
El primer recurso otorgado a vecinos y ambientalistas, data del 30 de agosto de 2021, luego de que en la demanda de amparo 855/2021 un grupo inconforme comenzó un juicio ante el Poder Judicial de la Federación contra actos promovidos por el gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa; Sinfra y la Secretaría del Medio Ambiente, Energías y Desarrollo Sustentable (Semaedeso).
La medida demandó frenar la tala de árboles sobre la avenida Símbolos Patrios, perteneciente a los municipios de Santa Cruz Xoxocotlán, San Antonio de la Cal y Oaxaca de Juárez.
Juez de Distrito, establece que de no otorgarse se causaría un daño inminente e irreparable.
Al otorgar la medida cautelar, el juzgado federal resolvió que “de no conservar los árboles que se pretenden derribar por la ampliación de una vialidad, podría ocasionar un daño inminente e irreparable al medio ambiente, toda vez que si bien interesa a la colectividad una circulación de vehículos fluida, también es del interés de la sociedad la preservación del arbolado”.
En ese sentido indicó que la conservación del arbolado es útil para “la conservación de los mantos freáticos”, además de que “producen oxígeno, purifican el aire, forman suelos fértiles, evitan erosión, mantienen ríos limpios, captan agua para los acuíferos, sirven como refugios para la fauna, reducen la temperatura del suelo, propician el establecimiento de otras especies, regeneran los nutrientes del suelo y mejoran el paisaje”.
Ante ello, resaltó que de no detenerse la tala de árboles se podría causar un daño inminente o perjuicios de imposible o muy difícil reparación, lo cual no podría ser reparado con el dictado de la sentencia definitiva, aun cuando ésta fuera favorable.
14 días después, el 13 de septiembre, el Primer Tribunal Colegiado en Materia Civil y Administrativa del Decimoprimer Circuito concedió una nueva suspensión provisional contra el derribo de árboles y daños al ecosistema por las obras de ampliación.
Al resolver un recurso de queja interpuesto por un grupo de ambientalistas, el Tribunal Colegiado dejó sin efecto una decisión emitida previamente por un juez de distrito, que se negó a suspender el proyecto por medio del cual se pretenden talar más de mil árboles.
En su resolución, el Tribunal Colegiado indicó que los trabajos del proyecto denominado Ampliación y Modernización de la carretera troncal 175 del kilómetro 1 al kilómetro tres, causarán un daño inminente a la esfera jurídica, pues de llegar a ejecutarse el derribo de los árboles esto desembocaría en perjuicios de difícil reparación no solo para la quejosa sino también para el medio ambiente.
La determinación indica sin embargo, que la orden emitida por el Tribunal Colegiado únicamente radica en el hecho de suspender la orden del derribo de árboles, por lo que los otros tipos de trabajo pueden seguirse realizando.
Esta suspensión provisional se dio dos semanas después de que un juez de distrito concedió otra suspensión provisional contra el derribo de árboles en Símbolos Patrios.
A esas resoluciones se sumaron dos otorgadas a sendos recursos promovidos por otro grupo de abogados que respalda a los ecologistas oaxaqueños.