Álvaro Morales

Durante las elecciones del pasado cinco de junio, que le dieron el triunfo al candidato de Morena, Salomón Jara Cruz, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) obtuvo en Oaxaca su votación más baja de los últimos 42 años, al perder 170 mil 242 votos en comparación con los comicios gubernamentales de 2016, que llevaron al triunfo a Alejandro Murat Hinojosa.

La pérdida histórica de sufragios del partido tricolor, coincidió con las aseveraciones hechas por diversos sectores políticos del ámbito nacional y estatal, que acusaron a Murat Hinojosa de haber traicionado a su partido y ceder el control de la entidad a Morena, en un pago de compromisos políticos asumidos con el presidente de México y fundador del partido guinda, Andrés Manuel López Obrador, quien, por su parte, aceptó que al término de 2022 podría sumar a Murat a la administración federal.

Al oficializar el conteo estatal de votos de las elecciones efectuadas hace 10 días, el Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Oaxaca (IEEPCO) reportó el lunes pasado que el aspirante de los partidos PRI y PRD, Alejandro Avilés Álvarez, obtuvo un total de 287 mil 998 sufragios, la votación más baja para el PRI desde 1980, de acuerdo con datos oficiales y de consultoras.

En comparación con las elecciones gubernamentales de 2016, el PRI perdió el 37 por ciento de sus votos (170 mil 242), precisa documentación del IEEPCO; sin embargo, si el resultado se contrasta con el de 2010, cuando la maquinaria priista obtuvo 584 mil 977 votos, la pérdida contabilizada en 2022 asciende a 296 mil 979 sufragios, a más de la mitad de la votación, agregan los reportes.

El año 2010, al igual que el 2022, marcó una derrota política estrepitosa para el PRI; no obstante, las circunstancias en que tales reveses se dieron son contrastantes, pues hace 12 años el tricolor perdió la gubernatura, tras 70 años de hegemonía, a pesar de haber alcanzado la mayor cantidad de votos de su historia, 584 mil 977; en 2022, mientras tanto, el instituto político registró la peor movilización de su militancia.

En 2004, con la operación del entonces gobernador José Murat Casab, padre del actual mandatario Alejandro Murat Hinojosa, el PRI ganó la gubernatura de Oaxaca, en la persona de Ulises Ruiz Ortiz, con un total de 522 mil 797 sufragios a su favor, 234 mil 799 más votos que en este año, documenta el archivo histórico del IEEPCO.

Y en 1998, el PRI y su candidato de aquel momento, José Murat Casab, obtuvieron la gubernatura con un total de 417 mil 421 votos, 129 mil 423 más que los obtenidos hace una semana y media por Alejandro Avilés Álvarez.

“Entregaste la plaza”

Veinte días antes de los comicios del cinco de junio, diversos actores políticos acusaron al priista Alejandro Murat de haber entregado la gubernatura de Oaxaca a Morena.

Lo anterior, después de que el 14 de mayo, el mandatario acompañó a la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, una de las principales aspirantes a obtener la candidatura  morenista a la Presidencia de México, a visitar la refinería Olmeca en Dos Bocas, Tabasco.

Además de Sheinbaum, Murat acompañó a otros mandatarios, como la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, y el gobernador de Tabasco, Carlos Manuel Merino.

“¿Qué sigue Alejandro? ¿Entregar el gobierno, después la Embajada o simplemente que vivas en total impunidad? Duda genuina”, escribió en Twitter la diputada panista Mariana Gómez del Campo.

Posteriormente, luego de las elecciones del cinco de junio, una vez que Murat reiterara sus intenciones de postularse como candidato presidencial en 2024, el ex presidente de México, Vicente Fox, volvió a hacer el mismo señalamiento en contra del representante del Poder Ejecutivo estatal.

“Alejandro Murat se destapa para ser presidenciable por el PRI en 2024. No es posible, si le entregó descaradamente la plaza a Morena!! Aguas, me parece un traidor!! (sic)”, escribió Fox.

AMLO admite que podría llamar a Murat

Y es que el lunes seis de junio, después de las elecciones gubernamentales efectuadas en Oaxaca, Hidalgo, Aguascalientes, Quintana Roo, Tamaulipas y Durango, el presidente López Obrador no descartó invitar a los gobernadores priistas de Oaxaca e Hidalgo a sumarse al gobierno de la Cuarta Transformación, ya sea a través de una Secretaría o, bien, con alguna embajada, tal y como sucedió con los exmandatarios priistas de Sinaloa, Quirino Ordaz, y Sonora, Claudia Pavlovich.

“Sí, poco a poco, poco a poco. (Alejandro Murat de Oaxaca y Omar Fayad de Hidalgo) Tienen experiencia, pueden representar a México en otros países, pueden ayudar aquí”, respondió el Presidente al ser cuestionado en su conferencia de prensa matutina sobre si incorporaría a su gobierno a los mandatarios de Oaxaca e Hidalgo.

“(Me refiero) a un encargo importante, porque aquí no hay cargos, son encargos o son cargos con encargo, pero se enojan mucho los expertos cuando hablo de estos temas.

“La idea es sacar adelante el proyecto, la transformación, va a ser realmente muy importante el legado a las nuevas generaciones”, agregó el mandatario al referir qué encomienda podría darle a ambos funcionarios estatales.

Tanto Oaxaca como Hidalgo eran considerados bastiones priistas; sin embargo, después de la elección del cinco de junio, ambas entidades serán controladas por Morena.

Después de las declaraciones del Presidente de México, el presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Moreno aseguró que si Alejandro Murat u Omar Fayad deciden aceptar algún cargo en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador serían expulsados del partido.

Paupérrima votación

Por su parte, cifras y datos del Instituto de Mercadotecnia y Opinión (IMO) apuntan que la cantidad de votos recibidos por el PRI durante 2022 es inferior a la captada por aquel instituto durante los años 1992, 1986 y 1980, cuando la Lista Nominal de Electores era de menos de un millón de habitantes, 200 por ciento menos que en la actualidad.

La empresa dedicada a la consultoría política reporta que durante las elecciones de 1992, el PRI obtuvo en Oaxaca un total de 382 mil 943 votos, 95 mil sufragios más que durante este año.

Asimismo, sus estadísticas históricas señalan que en 1986, el instituto político recibió 484 mil 103 votos y en 1980, recibió un total de 484 mil 603.