Obrador: Que las feministas lean a Luther King; la intervención de EU y los LeBarón
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Rodrigo Islas Brito
“Hay quienes sin información suficiente están pidiendo la intervención. Lamentable si son autoridades, está violando la Constitución”, expresó el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador a propósito de posicionamientos como el del gobernador panista de Guanajuato Diego Sinhue Rodríguez, quién declaró “que los mexicanos verían bien que inclusive vinieran fuerzas de otros países a ayudarnos”, a propósito del anuncio del presidente de Estados Unidos, Donald Trump de que su gobierno clasificará como grupos terroristas a carteles de narcos mexicanos, con lo que estaría abriendo la puerta a la acción de una intervención militar estadounidense en México.
En su conferencia mañanera Obrador finalmente accedió a hablar de los dichos de Trump con lo que el secretario de relaciones exteriores Marcelo Ebrard anunció que sobre este tema se reunirá con el fiscal general de los Estados Unidos, William Barr, en una reunión que aseguró tendrá lugar en suelo mexicano, donde tratará temas como el que hasta ahora la Unidad de Inteligencia Financiera sobre el tema de lavado de dinero ha bloqueado cuentas de 771 personas físicas, 1057 personas morales con un saldo de 5,329 millones de pesos.
Ebrard dijo que la principal contribución de Estados Unidos en la relación de cooperación bilateral que tiene con México ha sido en lo referente al tema de las armas del que EUA abastece el 70 por ciento de estas que cobran vidas y masacres en suelo mexicano, con lo que busca minar la capacidad de fuego de los carteles mexicanos, razón por lo que los dos países según el canciller sostienen una relación de cooperación mutua y no de antagonismo.
Una periodista recordó entonces que hay ya un antecedente donde Trump presionó el gobierno mexicano con la amenaza de un incremento terrible de aranceles con lo que logró la cooperación de Obrador para que la Guardia Nacional fuera designada como policía migratoria del país y México se convirtiera en una especie de tercera frontera de Estados Unidos.
En otros temas Obrador dijo respecto al tema que ha suscitado toda la situación, la masacre de mujeres, niños y niñas de la familia mormona y binacional, LeBarón, en el estado de Sonora, se ha creado un equipo especial de investigación que involucra a personal de la Fiscalía de aquel estado y de la Fiscalía General de la República.
“Consideramos que vamos a convencer al gobierno de Estados Unidos que podemos los mexicanos hacer justicia”, dijo AMLO sobre la re categorización estadounidense de los narcos mexicanos como terroristas, de la que por lo menos el gobernador Sinhue Rodríguez de Guanajuato se ha declarado partidario.
A pesar del antecedente de la presión arancelaria que derivó en una forzada cooperación de su gobierno con Estados Unidos en tema migratorios, Obrador dijo que Donald Trump ha sido respetuoso con las decisiones soberanas del gobierno de México. “No vamos a permitir que extranjeros armados activos en nuestro territorio”, delimitó el mandatario asegurando como prioridad el mantener una buena relación el gobierno del vecino país del norte.
El presidente mexicano ponderó que si se llegará a dar el caso de que la soberanía mexicana se viera en peligro por acciones del gobierno vecino se actuaría conforme a las leyes internaciones, escenario que al final el mismo Obrador calificó como improbable, asegurando que hoy lo que el gobierno que encabeza busca sobre todas las cosas es delimitar perfectamente la frontera entre autoridades y delincuencia.
De su plan de seguridad sobre primero atender las razones de la desigualdad que llevó a que la delincuencia más despiadada se convirtiera en cultura y costumbre, antes de volverle a declarar la guerra al narco, Obrador dijo que esta fue su propuesta de su campaña presidencial y que en ese sentido no ha engañado a nadie.
Después la prensa lo inquirió sobre el tema de Abril Pérez, madre de dos hijos ejecutada antier en la Ciudad de México por sicarios, crimen del que el principal sospechoso es su exesposo, quien le estaba peleando la custodia de los hijos y en el pasado la atacó salvajemente en dos ocasiones, golpeándola con un bate y acuchillándole la cara con un bisturí.
El exmarido, alto ejecutivo de una importante cadena de streaming internacional, fue a la cárcel por estos hechos, pero fue liberado por dos jueces mexicanos bajo el argumento de que cuando golpeó a Abril con un bate ella estaba despierta y no dormida por lo que para el juez quedaba claro que no era su intención matarla.
Obrador calificó el accionar del poder judicial en este caso como lamentable, donde no hubo apoyo legal y se dejó en libertad a un depredador. “Esto lo tienen que ver la Suprema Corte de Justicia. Se está llevando a cabo ya una limpia de jueces y magistrados”, declaró el presidente señalando que la cuota de justicia en México puede mejorar ahora que, del Consejo de la Judicatura Federal, órgano que tiene a su cargo la administración, vigilancia, disciplina y carrera judicial del Poder Judicial de la Federación, se haga cargo su cercano e histórico colaborador, Bernardo Bátiz.
Una reportera le hizo ver entonces al presidente que en México parece importar más cuidar los monumentos que la vida de las mujeres, a propósito de la más reciente marcha feminista que marcó piedras de héroes e historias con consignas y exigencias de justicia contra un país con recalcitrante cultura feminicida.
Obrador llamó entonces a las mujeres feministas a ejercer su derecho de disentir, protestando sin violencia, dándose a él mismo como ejemplo mientras aseguraba que en sus cuarenta años de opositor a todos los regímenes nunca optó por la fuerza de la aspereza.
Recomendó a las feministas manifestantes mexicanas que pintan monumentos leer libros del histórico activista estadounidense por los derechos humanos del pueblo afroamericano, Martin Luther King, donde habla de los principios de la resistencia civil. Incluso prometió que alguno de estos libros será editado en un futuro por el Fondo de Cultura Económica.