Oaxaca de Juárez, Oax.- En el ánimo social permea la idea de que las lluvias vienen a causar un sinfín de daños que hacen difícil el día a día de los oaxaqueños, ya que hay inundaciones, congestionamiento vial, baches por todos lados, lodazales que hacen intransitables las calles, todo lo que hoy se convierte en un paisaje diario para los que habitan la ciudad de Oaxaca y municipios conurbados, en la llamada zona metropolitana.
Pero la lluvia es un factor natural que sucede desde que la tierra tiene vida, trae beneficios sin los cuales la vida humana no fuera posible; lo que en las últimas décadas ha generado afectaciones es la mano del ser humano por la contaminación de la naturaleza, lo que trae consecuencias desastrosas con el llamado cambio climático.
El otro factor humano que ha provocado que las lluvias colapsen ciudades enteras, es la pésima calidad en las obras que se realizan; las lluvias han venido a exhibir la corrupción, deficiencia de constructoras, mala ejecución de proyectos viales que tienen mucha menos inversión de la que se autoriza en los presupuestos, generando lo que hoy vemos en Oaxaca: vialidades intransitables.
Con las lluvias aparecen verdaderas trampas sobre el asfalto o concreto hidráulico, que no sólo dañan vehículos, provocan accidentes, sino que ponen en peligro la vida de miles de oaxaqueños que tienen que transitar por ellas en motocicleta, vehículo particular, bicicleta, transporte público o caminando, todo esto sin que exista un plan bien articulado por las autoridades correspondientes, que mínimamente realicen un programa de bacheo en vialidades que no sean solamente las del Centro histórico o por donde transitan diariamente a sus casas o centros de trabajo.
La ciudadanía está cansada de la ineficiencia, de que se hagan de “la vista gorda “ los gobernantes respecto a esta problemática que se da año con año y que no se haga algo por evitar o resolver esto que ya se ha vuelto parte de lo cotidiano en Oaxaca.
Con obras bien planeadas, ejecutadas con la mejor calidad, con el presupuesto que realmente se les asigna, con supervisión real de autoridades gubernamentales, las lluvias no generarán el caos que hoy provocan y que en gran medida se debe a la deficiente ejecución por empresas y autoridades.
Los ciudadanos están cansados de no tener vías de comunicación en condiciones adecuadas, que permitan una movilidad segura, las lluvias solamente han exhibido la corrupción que es la verdadera amenaza.