Consumo de alcohol y malos tratos, en búsquedas de personas desaparecidas en Oaxaca
Compartir

Ivonne Mateo
Servidores públicos de la la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas Desaparecidas en Oaxaca (CEBPEO) consumieron bebidas embriagantes y tuvieron comportamientos inadecuados hacia víctimas indirectas de desaparición durante una misión de localización en la Sierra Sur de Oaxaca, así lo refiere un documento oficial de la instancia, mientras que personal de la misma denunció que estos eventos se repitieron en diversas ocasiones durante el primer semestre del 2024.
La minuta de acuerdos exhibe que los hechos se registraron en una jornada de búsqueda realizada en San Jacinto Tlacotepec, Sola de Vega, entre los días 2 y 6 de agosto de ese año.
En tanto, testimonios de dos personas que actualmente laboran en la CEBPEO y que solicitaron omitir sus datos por seguridad, señalan que el consumo de alcohol se repitió en al menos tres misiones más durante ese periodo, y que ningún servidor público involucrado fue sancionado o cesado por ese motivo.
Entre otras irregularidades denunciadas sobre la operatividad de la CEBPEO, están las ocurridas en las diligencias de búsqueda realizadas en los centros de reinserción social de la entidad entre los días 26 de agosto y 4 de septiembre del 2024, en donde familiares de personas desaparecidas sufrieron actos de hostigamiento en el tramo Juquila – Río Grande por sujetos a bordo de motocicletas que los grabaron y fotografiaron, sin que se observara alguna reacción por parte de un grupo de policías estatales que acompañaban a las víctimas durante la misión, según se expone en un oficio dirigido a la titular de la instancia, Michelle Julián López.
Asimismo, en el documento se acusa a la encargada de la diligencia, Leslie Karina Martínez Sosa, por no garantizar a los familiares de personas desaparecidas condiciones dignas para llevar a cabo la búsqueda de sus seres queridos, así como por haber alzado la voz a una de las víctimas indirectas.
“Pido de la manera más atenta tomar en cuenta las observaciones y tratar de ser más humanos y ofrecer apoyo integral a las familias que no pedimos estar en esta posición. Sabemos que los servidores nuevos tienen que aprender los lineamientos y la ley y eso se puede, pero cambiar una mala actitud de servicio es, aún algo que deja mucho que desear”, menciona el oficio en cuestión.